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| Foto EL NAJO |
Del género IRIS existen unas doscientas especies silvestres, apreciadas para confeccionar centros florales.
Su nombre proviene de la mitología griega. Iris ( diosa del arcoirís ) considerada guía y consejera, transmitía los mandatos de Zeus y Hera a la humanidad: se la representaba con aspecto de una joven alada que viajaba como el viento dejando tras de sí colores que salían de su cabeza formando una estela.
Crece a partir de un rizoma o de un bulbo y despliega impresionantes flores compuestas de tres pétalos externos colgantes y de otros tres internos más delgados, que se mantienen erguidos.
El lirio bulboso, tiene una floración, precoz, mientras que el de rizoma florece más tarde y resiste mejor el invierno, este es el que crece aquí salvaje y fuerte y todos los años da estas preciosas flores.
Exige cierta paciencia, pues primero se tiene que aclimatar al medio y no estará en todo su esplendor hasta transcurridos unos cuantos años en emplazamientos muy soleados.
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| Foto EL NAJO |
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