Jardines de Ámsterdam

Los Jardines de Keukenhof, cerca de Amsterdam. decenas de hectáreas de color.

Cuando uno viaja elige los destinos que más le gustan, por eso a los aficionados y amantes de las flores nos entusiasma visitar los jardines botánicos de países como Holanda o los Países Bajos que es lo mismo. Hay  ciudades que destacan por el encanto de sus jardines urbanos y parques, y una de las más impresionantes es Ámsterdam. La capital de Holanda tiene mucho encanto y además, muy cerca de ella, a unos 20 kilómetros, entre Haarlem y Leyden se encuentran los bellos jardines de Keukenhof. Situados en la localidad de Lisse muy cerca de Ámsterdam, es sin duda el jardín de flores más conocido de los Países Bajos, con casi 32 hectáreas, millones de tulipanes, narcisos, jacintos y otros tipos de plantas. Un disfrute intenso y gratificante.

Pronto comenzará la primavera y con ella en los jardines comienza un arco iris de colores acompañado de sonidos cantarines, las aves, también dan bienvenida al buen tiempo, comienza un festival que encandila a todos los aficionados a las flores, se puede definir como un gran caleidoscopio.

Por su espectacularidad, por su tamaño y por la cantidad de flores que podemos encontrar hay que visitar los jardines de Keukenhof. Normalmente este jardín abre sus puertas de finales de marzo y hasta mediados de mayo. Sus parterres están repletos de miles de flores, híbridos de diferentes especies, molinos, fuentes, lagos, paseos e invernaderos donde se venden semillas, bulbos y flores, donde uno perderá la noción del tiempo. Antiguamente, estos terrenos estaban dentro de las posesiones de una noble llamada Jacoba de Baviera, que creo un jardín de estilo inglés. El parque está dividido en cuatro zonas: Pabellón Orange Nassau; Pabellón Willem Alexander; Pabellón Koningin Beatrix; Pabellón Koningin Juliana.

Tras la muerte de Jacoba de Baviera paisajistas expertos en diseños de parques se encargaron de su preparación y en 1.949 los productores de flores comenzaron a utilizarlo para exponerlas, llegando gente de todo el mundo a visitarlo, tuvo tanto éxito que se abrió al publico en 1.950.

Los tulipanes y las crisis económicas.

La historia del tulipán es muy interesante fue un fenómeno comercial en el siglo XVII en Holanda. Hay muchos libros de economía que han tratado el fenómeno e incluso, una película, “ Fiebre de tulipanes “, refleja la importancia que llegó a tener la inflación y la especulación que se creo entorno a estas flores. Un bulbo valía su peso en oro, tanto se especuló que, cuando el mercado se colapsó, explotó la burbuja que se había creado y mucha gente se arruinó.

Estas espléndidas y vistosas flores pertenecen a la familia de las Liliáceas, son oriundas de Ásia Menor (en la actual Turquía). Llegaron a Europa en 1.554 de la mano del embajador austriaco Ogier Ghislain de Busbecq, un horticultor al servicio del Sultán de Turquía, este llevó varios bulbos a los jardines imperiales de Viena. Casi un siglo después los tulipanes habían invadido los Países Bajos, desde entonces se exportan a todo el mundo.

Otros jardines en la zona de Ámsterdam.

Parque de Vondelpark, en el centro de Amsterdam, lleno de gente y de bicicletas.

Y ya que estamos en Ámsterdam será una buena elección visitar también el Hortus Medicus, el Jardín de las Hierbas Medicinales, es sabido la importancia que tenían en aquella época, con sus esencias se elaboraban: medicinas y esencias y los doctores investigaban, enseñaban y examinaban a los estudiantes de farmacia.

En 1.646 Johannes Snippendaal describió 796 especies de plantas algunas decorativas y otras medicinales, las clasificó y completó el primer catálogo del Hortus Medicus. El proyecto de Snippendaal se completó en 2007 y lo más sorprendente e interesante es que las plantas que actualmente crecen en sus jardines son las mismas que se cultivaban en 1.646.

Pero la cosa no se acaba aquí, Ámsterdam es una ciudad privilegiada por sus numerosos parques. En la zona oeste de la ciudad está el parque urbano Oosterpark un sitio para descansar, comer y disfrutar al aire libre. El Parque Vondelpark, también público, se halla en el corazón de la ciudad. El parque Flevopark en el extremo Este, incluye instalaciones para poder practicar todo tipo de deportes. Por último, el Rembrandpark en la zona oeste que al igual de los otros son ideales para disfrutar con la familia en plena naturaleza.

Para vistar os jardines y reservar su entrada utilice los anuncios que colocamos a continuación.