Durante los meses de febrero a julio podemos ver por los montes unos pequeños arbustos con delicadas flores que parecen de papel, son silvestres y de gran belleza.
Según el lugar se las conoce popularmente como: Jara blanca, jarastepa, rosado o jaguarzo y crece en los bosques mediterráneos de clima suave.
Es una especie “ fanerógama y pertenecen a la familia Cistaceae, tolera perfectamente el pleno sol y no necesita mucho riego.
Si nos detenemos a observarla veremos que la planta tiene hojas estrechas, alargadas y al tocarlas se nos pegan los dedos, esto es debido al ládano, una resina olorosa de aspecto brillante.
Su fruto es una cápsula ovoidea de 7 a 13 milímetros insertada en el cáliz donde están sus semillas de un color marrón claro.
Es planta medicinal, se utilizaban pétalos y hojas, aunque actualmente se usa poco.